martes, 15 de junio de 2010

Hay días en la vida en que no sucede nada, días que pasan sin nada que recordar, sin dejar rastro, como si no fueran vividos. Pensándolo bien, la mayor parte de los días son así, y  sólo cuando el número de los que nos quedan se hace claramente más limitado nos preguntamos cómo ha sido posible que dejáramos pasar, distraídamente, tantísimos. Pero estamos hechos así: sólo después se aprecia el antes y sólo cuando algo está en el pasado nos damos mejor cuenta de cómo sería tenerlo en el presente. Pero ya no esta.
Para eso creamos la fotografía, para retratar los instantes de la vida.
Y hoy, tengo una nueva compañera de batallas.
Primero vino mi queridisima F55:


Despues desenfunde una antigua Werlisa Color, de mi padre:


 

Y ahora, ha llegado mi queridísima "rusa" o "tanque", una cámara del año 65, lista para disparar...
Os presento a mi Zenit E:

Estoy como un niño con zapatos nuevos.... ^^
Listo para seguir con esta vida tan ajetreada, pero parándome siempre a respirar y disparar.





0 delirios....:

 
Copyright 2009 α ㊲ Ω